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sábado, 22 de marzo de 2008

El sistema "inteligente" de Bet365 para aceptar apuestas

Hace mes y medio, en mi entrada "El incauto Tramposo" denunciaba ciertos errores en el procesamiento y/o corrección de las apuestas en directo por parte de Bet365. En estos momentos creo estar capacitado para ofrecer una teoría sobre cuál era el problema que no debería de alejarse demasiado de la realidad.

Con toda seguridad, el "cambiazo" se producía en el momento de que las cuotas a las que se quieren apostar en el directo cambian. En esos casos hay un mensaje que avisa de que se ha producido el cambio y te coloca en el cupón la nueva apuesta. Si se vuelve a intentar a hacer la apuesta por segunda vez y (casualmente) vuelve a cambiar, la programación del sistema falla y no fija la apuesta anterior al nuevo precio, sino que salta a la siguiente opción al nuevo precio. Ignoro si el fallo se ha subsanado o no; probablemente sí. Es decir, el proceso sería el siguiente:

Ejemplo:
Under 194,5 ?--> error, precio cambiado a 193,5
Under 193,5? --> error precio cambiado a 192 (over, cambiazo)
Over 192?

En ese momento si se vuelve a intentar cerrar la apuesta se está apostando a la opción contraria, y en entre tanto cambio al apostante imperceptiblemente se le puede "colar" la llamada "distinta" por el malogrado Carroll, imperceptiblemente. Creo que el error se producía de forma mecánica y sin en principio ánimo de lucro por parte del bookie. Obviamente la responsabilidad subsidiaria es 100% del bookie, en mi opinión. Con todo, si las apuestas resultaron siempre perdedoras no fue por otra cosa más que porque eran buenas apuestas y así lo demostraba la contumacia del jugador intentando cerrar la misma apuesta, casi a cualquier línea ofertada.



El caso es que para una casa como Bet365 que hace una gran cantidad de apuestas "in running", eventos Live o como se quieran llamar, y especialmente por el hecho de utilizar modelos para todo tipo de deportes, alguno de ellos muy delicados, ha hecho agudizar el ingenio del bookie para ganar alguna ventaja extra.

Las apuestas que se realizan tienen algún retardo, eso es obvio. Se estima en unos 8 segundos frente a una conexión de Red medio decente. Ese retardo tiene sentido en cuando se le debe de dar algo de ventaja al oddsmaker para que cambie las lineas adecuadamente después de un hecho relevante y para compensar retardos en la transmisión televisiva. Especialmente delicado es esto último. Probablemente 8 segundos no sea tiempo suficiente de ventaja sobre alguien que esté a pie de campo, o en su defecto oyendo el partido por una radio local, con el dedo encima de la tecla, cual gatillo, esperando el error. Esta es una técnica considerada fraudulenta por parte del bookie y está sometida a vigilancia y sanción. Sin embargo, en ocasiones es difícil de demostrar y puede ser utilizada temporalmente por algún intrépido lector que sea incapaz de ganar dinero por métodos ordinarios.

El caso es que durante el tiempo de espera se podía producir un cambio en la cuota. A lo largo del tiempo Bet365 ha aplicado políticas diferentes, con dos objetivos, aumentar el volumen de apuestas y disminuir el volumen de fraudes.
  • 1) La primera idea fue la obvia: anular la apuesta. Sin embargo, si el bookie espera ganar un 5-7% en cada apuesta normal, claro, eso es perder dinero. Y eso sin hablar de la frustración que produce en el apostante casual el hecho de no poder cerrar sus apuestas repetidamente. Esto motiva a algunos a utilizar medios como el obsoleto teléfono. Además se detectó un segundo problema, más grave si cabe. Durante el tiempo de "espera", el usuario estaba legitimado a cancelar su apuesta, lo que podía facilitar el comportamiento fraudulento. Pongamos el siguiente ejemplo: El apostante está viendo un partido de voleibol en la parte final de un set. Entre punto y punto, apuesta a favor del equipo que saca, con el tiempo calculado para cancelar su apuesta si el equipo receptor no afina con la recepción, si construye mal o hasta si se produce un ace. Este tipo de maniobra es imposible de combatir por parte del bookie, salvo dejando de ofrecer cuotas en esa fase del partido o mejorando la "inteligencia artificial" de su sistema.
  • 2) Durante un breve tiempo se modificó el sistema para que si durante el tiempo de espera se producía un cambio en la línea, la apuesta se cerraba automáticamente a la nueva línea. Esto es un completo abuso y se volvió muy impopular, hasta para los avezados punters británicos, que como bien dijo alguien un día, tienen mucha más experiencia que Anja. Sobre todo más experiencia en beber pintas.

  • 3) Finalmente se pasó al sistema actual, de reciente incorporación, en el que el sistema es más "pillo". El botón de cancelar no sólo se vuelve inservible, sino que pasa a jugar a favor del bookie. Cuando el usuario cancela la apuesta durante su procesamiento, el sistema lo que hace es congelar la apuesta unos segundos y comprobar el movimiento de la linea. Si la cotización se mantiene o es más baja, acepta la apuesta. Si sube, no ejecuta la operación y le propone al jugador cerrar la apuesta al nuevo precio.
Claro, con tanto cambio y trabajo de desarrollo, normal que se cuele alguna errata en el diseño del código, algo que sólo 7-8 personas en la empresa pueden conocer hasta que se subsana, y esas personas no son precisamente los responsables de atención al cliente como Jo D.

sábado, 2 de febrero de 2008

El incauto tramposo


El paralelismo entre las apuestas y la magia es continuo. Tenemos por ejemplo "la magia de Anja Ander". Pero tenemos también verdaderos profesionales del ilusionismo, y los retrato en mi blog de esta forma. En primer lugar tengo que manifestar que me parece 100% que existan reglas en los bookies que les permitan corrigir ciertos errores en las apuestas, bien debidos a modelos matemáticos o a errores humanos en la escritura, ya que hay que reconocer que el que ofrece una apuesta está mucho más expuesto que el que la acepta. Está en sus reglas y todos lo aceptamos cuando empezamos a operar con una casa. Lo que no es de recibo es que se quiera convalidar a ese tipo de errores los que comete un oddsmaker por impericia al poner precio (y no por torpeza al teclear). En su día ya dedique una serie a Bwin, pero he empezado a pensar que había sido un poco injusto con ellos. Es cierto que la peor fama es la suya, pero en la actualidad yo y mucha otra gente pensamos que los verdaderos artistas del ilusionismo son los chicos de Bet365.

El truco de hoy se denomina "El incauto tramposo" y fue inventado por Pepe Carroll. Pepe Carroll fue un muy conocido mago y showman de televisión. Murió en 2004 con 45 años, solo, malogrado y deprimido por problemas personales y profesionales. Como mago obtuvo a finales de los ochenta premios internacionales, como ser campeón y subcampeón del mundo de Cartomagia. Como showman todos recordarán su programa "Genio y Figura" donde entre otros debutaban en televisión Chiquito de la Calzada, Paz Padilla o Felipe Segundo. Es un juego de apuestas, en el que el mago propone una apuesta en una situación relativamente sencilla, pero las cosas no son tan claritas como se muestran muchas veces. Recomiendo ver el video antes de proseguir con la lectura de la entrada. El truco en cuestión es el siguiente:



¿Cómo la hace? No se sabe. Es magia. En los buenos trucos de magia no es posible encontrar el motivo del truco salvo que el interesado lo desvele. No obstante de alguna forma, la casa londinense ha descubierto el secreto de la magia de Carroll y lo aplica a sus propios juegos, en las apuestas en vivo (Betting in running), que es lo más parecido que existe en un bookie a la magia de cerca. El oddsmaker y el jugador uno frente al otro, al mismo tiempo, y con una resolución rápida de las apuestas.

La primera vez que escuché a alguien mencionar estas habilidades de Bet365 fue en Noviembre del año pasado. Dicho usuario se quejaba de que en un partido de ACB en directo, él había apostado al over/under y ganado, pero en el boleto de apuestas aparecía la apuesta contraria a la ideada (llamaremos la que el usuario en realidad quería hacer como "la distinta"), y dada obviamente como perdedora. A todos nos ha pasado eso alguna vez y casi siempre pensamos que ha sido error nuestro, en el fragor de la batalla, confundir el over con el under al hacer click con el ratón. En cambió el debería estar muy convencido cuando envió varios emails a la ayuda de la casa. Lo cierto es que por miedo a represalias se ha negado a facilitarme el contenido de las respuestas de Bet365 o el pantallazo de su apuesta. Se entiende esta medida, ya que hay que suponer que los ingresos que obtiene este apostador de esa casa son grandes en comparación a su mensualidad.

La segunda vez que escuché esto le sucedió a otro jugador, que apostó al under en un partido de NHL, concretamente en el encuentro entre Claveland y Buffalo. Dicho apostante lo estaba viendo por la tele, cuando de repente empezó a nevar copiosemente, pese a lo cual Bet365 no reaccionó. Con la nieve los corredores avanzan con más sigilo, caen de culo y resbalan. Por lo que son partidos de bajísima anotación. Concretamente la linea era de 34,5 ptos. Fue ligeramente corregida a 26 (otros bookies tenían ya 20 puntos). Pero el resultado final fue aun más escueto: 8-0, la anotación más baja de estos equipos en toda la temporada. La sopresa vino al revisar las apuestas, al comprobar que Bet365 se demoraba en exceso en su pago... Nuevamente, la "distinta" era la que hubiese ganado.


Tras estos comentarios, me decidí a experimentar por mi mismo los lives de Bet365. Aunque no soy muy amigo de los lives, tenía que comprobarlo... Y no pasaron muchos días cuando tuve mi primera experiencia de este tipo. En Navidades, el/los responsables de baloncesto de Bet365 se fueron de vacaciones y su lugar, modelos en mano, fue ocupado por suplentes. Esto produjo varios desajustes, como el no ofrecer ni un solo partido en directo en un martes de Euroliga o no manejar el modelo con total soltura. Concretamente, en un partido de baloncesto que estaba siguiendo Bet365 no estaba afinando con los totales, ofreciendo en todo momento 3-4 puntos por encima de las lineas que yo estimaba según el propio modelo de este bookie, que usa un algoritmo muy sencillo basado en tres variables: el tiempo jugado, los puntos anotados y la linea de puntos inicial, más un ajuste manual en el último cuarto para mitigar el defecto de las faltas provocadas del final. Pienso que el operario de ese live activo ese ajuste sistemáticamente, sin necesidad, con demasiada agresividad y cuando aun quedaba muchísimo tiempo para la finalización del partido. Por lo que aposté repetidamente por el UNDER en momentos puntuales de los 2 partidos de la madrugada del día 27 de diciembre: Pinstons-Nets (FT: 92-91, =182) y Bulls-Spurs (FT: 94-79, =173). Mi sorpresa es mayuscula cuando veo... MAGIC!! La "distinta" gana en dos de las cuatro apuestas.



Dos cambiazos el mismo día creo que no concuerda con la posibilidad de que la culpa de estos sucesos sea del usuario y ajena al bookie, sino más bien lo contrario. Casualmente todos las apuestas cambiadas habrían resultado ganadores y ninguna apuesta perdedora fue casualmente corregida erroneamente. Por lo que, pensando mal, en aquel momento pensaba que el truco del episodio mágico era el siguiente. El empleado que lleva las apuestas en directo la caga y pierde dinero. Se cabrea y antes de corregir las apuestas del partido, le da la vuelta a las apuestas de 3 o 4 clientes indeseables para maquillar el resultado y pista. ¡Qué se yo! tal vez ese empleado trabaje a comisión... Alguna vez lei que alguien en los servicios de atención al cliente (en Bwin creo) explicaba al consumidor que no era posible cambiar los boletos de apuestas una vez hechos por ninguna de las partes, que eran como un centollo (relativo a la posibilidad de "cambiazos"). Bien. Es mentira gorda esto. Se puede cambiar todo, y cuando digo todo es TODO, excepto la cantidad de dinero, el código de la apuesta y la fecha de realización de la apuesta. El que tal vez no lo pueda cambiar es el chico de atención al cliente claro (que casi siempre es sudamericano y cobra poco), pero porque no le dejan, no porque no se pueda.

El caso es que mi teoría, como con los trucos de magia, se desmontó poco después. Contumaz, a pesar de los cambiazos, seguí testeando el live de Bet365 en otros deportes y nuevamente me encontré con un tercer acto de ilusionismo, pero esta vez aun más mágico. Balonmano. No había rastro de la "distinta", no ya al acabar el partido. ¡¡Sino un minuto después de realizarse la apuesta!! Pude darme cuenta ya que iba revisando una a una cada apuesta realizada en mi historial cada vez. Afortunadamente las lineas no habían cambiado en absoluto desde la realización de mi apuesta "cambiada" y pude apostar en la dirección contraria (perdiendo un 7% de margen eso sí, a la salud del bookie). Casualidad o no, otra vez... una vez más, la "distinta" (suplantada por la marcada con el círculo rojo) era la apuesta ganadora. Después de esto, mi tesis es que la magia de Bet365 era un problema automático, que estoy seguro que ellos mismos conocían y probablemente hayan solucionado ya (o no).


Concretamente la apuesta era el under de los goles marcados por el Viborg contra Slagelsea. El equipo de Anja Andersen, que tiene a Cecile Levanger, la mejor portera del mundo, y una de las mejores defensas de europa,llegó a disponer de handicap +9,5 a su favor en las apuestas en algún momento durante la primera parte. Pero en una increible remontada, lograron imponerse a domicilio al gran favorito al campeonato, el Viborg de Bojana Popovic (@1,10 a ganador de liga), por un increible 28-30, tras dejarlas en menos de 10 goles en el segundo tiempo. La cohesión de la magia de Anja Andersen y el ilusionismo de Bet365 son el colofón final de esta ilustrativa entrada de hoy. Y en estas situaciones sólo es posible actuar como hizo ella...


martes, 22 de enero de 2008

La programación de apuestas en "Betting in Running" (BIR)

También conocidas como "lives", son una de las principales atracciones de las casas de apuestas potentes. ¿Por qué? Porque requieren recursos humanos y técnicos, lo que no está dentro de las posibilidades de cualquier bookie de medio pelo. Las dos bookies con mayor variedad y calidad de apuestas en directo son probablemente Bwin y Bet365. Esto incluye streams y gran cantidad de apuestas chorras procedentes del desarrollo de modelos para todos los deportes. Incluso se dice, se comenta, que Bwin llega a ofrecer lives de partidos que no se dan en televisión pagando in situ a espectadores y recibiendo vía teléfono móvil la información de las situaciones relevantes para el cambio de cuota, que en un partido de futbol pueden ser: minuto, resultado y expulsiones, en ausencia de otras partes correctoras como Betfair. No obstante hay que observar que casualmente estas dos compañías están señaladas en mi blog como practicantes habituales de políticas desleales. De hecho estoy preparando una entrada caliente relativa a Bet365, respecto a una de sus últimas "ilusiones" que deja muy atrás la conocida "magia" de Anja Ander.


En general cualquier bookie grande tiene hoy por hoy. Ladbrokes, Sportingbet y Interwetten son aceptables en ese aspecto y, dentro de mis recomendadas, Paddy Power, con opciones muy similares a Bet365 y una oferta de snooker difícil de igualar. Las buenas bookies nórdicas Nordicbet, Unibet o Expekt están ahora mismo ligeramente retrasadas, probablemente en proceso de desarrollar buenos modelos de fútbol.

El caso es que de vez en cuando se da una situación frustrante. Bet365 la practica muy habitualmente. Esto es programar todos los eventos live posibles del mundo mundial, pero a la hora de la verdad ofrecer la mitad o menos. Esto tiene un lado positivo. Cuando el visitante ve la programación a primera vista tiene la sensación de que la bookie es muy potente. Pero el efecto negativo es que a la segunda o tercera vez que espera por un evento deportivo y no se da, aparecen repentinamente las ganas de cambiar de casa.

Ojo. No siempre la culpa es de la casa de apuestas. Por la sencilla razón de que algunas televisiones no son muy fiables con sus programaciones. Si algún canal si tiene que llevar la palma en este aspecto es Eurosport. Su afición a cortar los partidos, a pasarlos a Eurosport2 sin previo aviso y a poner cosas enlatadas en lugar de eventos en vivo no tiene igual en ninguna otra televisión. Los principales damnificados son el voley y la copa ULEB, pero también el balonmano, incluso el tenis... Y como se muestra en el siguiente vídeo, incluso muchas veces los propios comentaristas reciben sobre la marcha los cambios de programación y muestran su descontento. En este caso, el locutor Manuel Poyán se deja el micrófono abierto durante la publicidad y ilustra a los espectadores con su opinión personal sobre los directivos de Eurosport, ante la decisión de no ofrecer el partido de Rafa Nadal y sustituir dicha emisión por una competición de saltos de esquí. De momento, que se sepa, aun no le han echado...


martes, 14 de agosto de 2007

Los "apostadores locos" compitiendo en los Lives

Los mercados de apuestas en directo (Live) son probablemente los mercados en los que más dinero se mueve. Las casas tradicionales tienen un gran respeto a este tipo de apuestas ya que el oddsmaker tiene que tener una experiencia adecuada y suficientes reflejos para aprovechar su ventaja. Sin embargo, en las casas de P2P como Betfair, donde la empresa no arriesga su propio dinero, la cantidad de eventos en Live se multiplica y únicamente se requiere del cuidador del mercado que suspenda las cotizaciones en aquellos momentos especialmente delicados en los que hubiese una acción que pudiese cambiar radicalmente el sentido de las apuestas. Por ejemplo, un gol.

Lo cierto es que multitud de apostantes se ven atraídos por las apuestas en Live y presentan sus credenciales para reclamar su parte del pastel. Pero no todos lo hacen con las mismas posibilidades. Nos encontramos ante una carrera que no tiene nada que envidiar al duelo más encarnizado entre Lewis Hamilton y Fernando Alonso. Son los "Apostadores Locos".



  • El Ferrari

Los pilotos del "cabalino rampante" están viendo el evento en cuestión por televisión en una pantalla panorámica de gran número de pulgadas, colocada justo encima de la pantalla del ordenador. Han elegido un canal con una conexión a un satélite cercano y tal vez aprovechen el audio de una emisora de radio, que suele ser algo más rápido. Su conexión a Betfair la realizan a través de un sofware personalizado, que es más rápido y intuitivo, con más prestaciones gráficas y que les permite operar en varios mercados al mismo tiempo.

  • El McLaren

El equipo británico está especialmente interesado en conseguir información privilegiada en el Live con respecto al resto de equipos. Para ello recurren a técnicas de espionaje que no tienen nada que envidiar a las del MI6. McLaren tiene a un contacto a pie de pista, con un auricular en la oreja y un pequeño micrófono colgando de un crucifijo en el cuello. Al otro lado de la transmisión hay un operario conectado a Betfair a través de un sofware especial, aunque puede estar también conectado a Rybka, según las circunstancias. Cada vez que existe un 15-30 o un punto de break envía una señal al operador, que apuesta rápidamente. Este tipo de técnica es especialmente útil si el evento no tiene cobertura televisiva o ésta tiene un importante retardo.

  • Toyota

El gran problema de los usuarios de Toyota es que no se dan cuenta que los livescores oficiales, incluso los más rápidos, pierden 4-5 segundos por vuelta con respecto a las escuderías punteras. El punto fuerte del coche es que en algunos circuitos la telemetría aporta información muy útil, aunque no siempre el servicio de estadísticas está disponible. Aparte de eso, cuando hay lluvia, la ausencia de imágenes hace sufrir sobremanera a estos coches. Los errores mecánicos engranan de vez en cuando la marcha atrás cuando tocaba poner tercera y con mucha frecuencia el motor se colapsa y el Toyota se queda tirado en medio de la pista a mitad de carrera. Y lo peor es que en esa caso el piloto está tan mareado que no sabe si ha salido el safety car o es que hay bandera roja.

  • Williams

El equipo británico tiene un palmares envidiable. Sin embargo, la falta de recursos económicos hace que esté sufriendo en el pelotón de cola. Al igual que McLaren tienen un contacto con información más o menos de primera mano, pero esta no se transmite por medio de alta tecnología sino a través de chats o tags (Bwin, Winpicks u otros). El proceso es lento, pero el gran enemigo de la técnica es la capacidad del piloto y sus observaciones cualitativas sobre las posibilidades de las apuestas existentes, que hacen perder al apostante su propio e independiente raciocinio. También es molesta la existencia de ruido y de fakes.

  • Toro Rosso

Toro Rosso, filial de Redbull, usa los motores de Ferrari del año anterior. Y Claro, Ferrari es Ferrari, pero la tecnología avanza a pasos agigantados. En las apuestas se corresponden a aquellos que siguen las transmisiones por las emisiones de Internet (streams), del tipo de las que se pueden encontrar en los programas promocionados por Rojadirecta.com. Les sirve para tener una idea del rendimiento de los jugadores, pero el retardo supera el medio minuto... El punto débil de su mecánica es el buffer, ya que el terrible retardo está perfectamente asumido como una limitación del coche.

  • Superaguri

Superaguri sigue el partido en un livescore de tipo general, como el proporcionado por Bet-at-home. Por ejemplo, en un partido de tenis, conoce la puntuación de los juegos, pero no de los puntos. Y esto sin menoscabo de que el motor pueda romper en cualquier momento. Hay que reseñar que el retardo puede ser en ocasiones de varios minutos y que cuando acaba la competición, el pilote de Superaguri vuelve a su casa en el mismo coche con el que compitió, lo que da una idea de lo precarias que son sus condiciones para competir.



Una vez descritas las posibilidades técnicas de cada apostante, sólo resta lanzar una pregunta al aire. En esta situación... ¿quién pensáis que puede salir victorioso?