Nos encontramos en la situación siguiente: en nuestro foro habitual encontramos un pick altamente recomendado, por un por un tipster de confianza tal vez, o por un gurú de prestigio (según se mire pueden llegar a ser hasta lo mismo) y decidimos lo que en el argot se denomina "seguirle". Pero (¡ay!) cuando llegamos a nuestro bookie comprobamos, muy a nuestro pesar, que las condiciones han cambiado. ¿Qué hacemos ahora?
En situaciones así nos damos cuenta de lo débil que es el sistema más popular para mostrar el valor de un pick a priori (stakes), por todas las razones que expliqué en su momento: es un sistema poco exacto, muchas veces se emplea mal, es especialmente subjetivo, etcétera. El pick no es la predicción del resultado en un evento deportivo, no. Es el estudio de la relación calidad/precio, o lo que es lo mismo, cuota/probabilidad. Si las lineas se mueven y cambia la cuota, o bien la linea del handicap, las condiciones han cambiado y el valor del pick, si alguna vez existió puede haber desaparecido por completo. ¿Entramos o no con las nuevas condiciones? Ir a favor del where the money goes, es como ir a favor de viento, nos refuerza la confianza en el pick. Probablemente la tendencia más natural sea esa, la de dejarse llevar, la de seguir a las masas. Si la apuesta baja, es que es buena. ¿No? Por otro lado, y sobre todo cuando el movimiento de las líneas/cuotas ha sido sensible, puede existir una reacción psicológica de tener reticencia a apostar en esas condiciones inferiores. Ser más lento que los demás es una sensación desagradable y es humano que aparezca una sensación de vértigo. La cuota tal vez haya bajado ya demasiado.
En primer lugar hay que pararse a pensar una cosa. ¿Por qué se han movido las líneas? La causa primera se explicaba en esta entrada: porque ha entrado dinero en esa dirección. Pero ¿a qué se debe esa entrada de dinero?
En ocasiones puede deberse exclusivamente a que el pronosticador de renombre mencionado haya publicado un pick en un foro con cierta participación. En la actualidad, yo publico en un portal que aun es pequeñito (Soloapuestas), pero cuando en el pasado fui moderador de otro foro con más participación, de forma más o menos injusta me gané cierta reputación como tipster, y cuando publicaba cualquier cosa con un poco de contumacia, las lineas se movían con muchísima rapidez. Hay que pensar que todos los tipsters publican apuestas malas alguna vez y que sus yields son limitados, así que cuando una apuesta no es especialmente buena (y me refiero a apuestas muy evidentes), una cuota movida ha perdido gran parte de su valor.
También hay que tener en cuenta que no todos los deportes se mueven con la misma facilidad. En los deportes minoritarios (todos menos fútbol, caballos y tenis), el movimiento de las cuotas suele ser mucho más rápido porque los oddsmakers no tienen suficiente preparación y no toman con seriedad los mercados en los que se mueve menos dinero ya que son menos lucrativos. Del mismo modo, la posibilidad de errores graves es mucho mayor en este tipo de eventos, o en las apuestas especiales, que requieren un alto grado de conocimiento. Otra cosa que influye es el margen del bookie en esa apuesta determinada. A menor margen, más movimientos en las lineas y, por lo general, una búsqueda más eficiente de la asignación de cuotas.
Otras veces las lineas se mueven de forma natural. Mucha gente, sin contacto aparente, entra en la misma dirección independientemente. En estos casos, hay más probabilidades de que el valor se deba a un demérito del oddsmaker, a una cuota especialmente mal puesta. Si es debido a un rumor de fixed (tongo), esto tiene sus propias reglas, pero si es un partido normal, que ha sido mal evaluado, nos encontramos en una situación interesante. ¿Cómo de mal puede llegar a estar puesta una apuesta? Mucho. Muy mal puesta. En las entradas siguientes señalaré algún ejemplo ilustrativo de esto. Y en esos casos, al oddmaker le suele costar bastante reaccionar a tiempo. Los oddsmakers son algo así como tipsters frustrados, que se creen más cerca de Dios que del hombre, y reconocer que se han equivocado de forma flagrante les lleva mucho tiempo. Bajar una linea de @1,85 a @1,75 no es grave. Pero si en un partido de fútbol el oddsmaker tiene que mover un gol o gol y medio de handicaps, prácticamente está asegurando perder dinero en el evento. Y claro, esto es una situación un poco embarazosa. ¡A ver cómo se lo explica a su jefe! Es humano tener la tentación de no bajar del todo las lineas para tener alguna posibilidad de ser auxiliados por el azar, que sabemos que a largo plazo no influye, pero que a corto plazo sí.
A este respecto, un detalle interesante es que si un oddsmaker se equivoca gravemente en una evento, probablemente es porque no tiene ni idea de qué es a lo que está asignando cuotas o porque lo está realizando con cierta superficialidad. Nos ha dado una muestra evidente de debilidad. Por lo que no está de más chequear el resto de partidos de la jornada de esta competición, para intentar descubrir nuevos errores, una mala evaluación masiva de las cuotas.
El movimiento de cuotas también trae consigo otras ventajas añadidas. No todo es malo. No todo es apostar en peores condiciones. También vamos a conseguir una pequeña ventaja respecto a los límites, vamos a disponer de una oportunidad para volver a apostar y sobreponderar. Si la línea de handicap se mueve, en la práctica se trata de una apuesta diferente y si habíamos agotado los límites (personales o generales) disponibles para la apuesta original, vamos a poder volver a realizar una nueva apuesta en el mismo evento. Lo mismo suele pasar en muchos bookies si la linea se mantiene, pero cambian las cuotas. Son apuestas diferentes y vamos a poder ampliar nuestros límites.
En situaciones así nos damos cuenta de lo débil que es el sistema más popular para mostrar el valor de un pick a priori (stakes), por todas las razones que expliqué en su momento: es un sistema poco exacto, muchas veces se emplea mal, es especialmente subjetivo, etcétera. El pick no es la predicción del resultado en un evento deportivo, no. Es el estudio de la relación calidad/precio, o lo que es lo mismo, cuota/probabilidad. Si las lineas se mueven y cambia la cuota, o bien la linea del handicap, las condiciones han cambiado y el valor del pick, si alguna vez existió puede haber desaparecido por completo. ¿Entramos o no con las nuevas condiciones? Ir a favor del where the money goes, es como ir a favor de viento, nos refuerza la confianza en el pick. Probablemente la tendencia más natural sea esa, la de dejarse llevar, la de seguir a las masas. Si la apuesta baja, es que es buena. ¿No? Por otro lado, y sobre todo cuando el movimiento de las líneas/cuotas ha sido sensible, puede existir una reacción psicológica de tener reticencia a apostar en esas condiciones inferiores. Ser más lento que los demás es una sensación desagradable y es humano que aparezca una sensación de vértigo. La cuota tal vez haya bajado ya demasiado.
En primer lugar hay que pararse a pensar una cosa. ¿Por qué se han movido las líneas? La causa primera se explicaba en esta entrada: porque ha entrado dinero en esa dirección. Pero ¿a qué se debe esa entrada de dinero?
En ocasiones puede deberse exclusivamente a que el pronosticador de renombre mencionado haya publicado un pick en un foro con cierta participación. En la actualidad, yo publico en un portal que aun es pequeñito (Soloapuestas), pero cuando en el pasado fui moderador de otro foro con más participación, de forma más o menos injusta me gané cierta reputación como tipster, y cuando publicaba cualquier cosa con un poco de contumacia, las lineas se movían con muchísima rapidez. Hay que pensar que todos los tipsters publican apuestas malas alguna vez y que sus yields son limitados, así que cuando una apuesta no es especialmente buena (y me refiero a apuestas muy evidentes), una cuota movida ha perdido gran parte de su valor.
También hay que tener en cuenta que no todos los deportes se mueven con la misma facilidad. En los deportes minoritarios (todos menos fútbol, caballos y tenis), el movimiento de las cuotas suele ser mucho más rápido porque los oddsmakers no tienen suficiente preparación y no toman con seriedad los mercados en los que se mueve menos dinero ya que son menos lucrativos. Del mismo modo, la posibilidad de errores graves es mucho mayor en este tipo de eventos, o en las apuestas especiales, que requieren un alto grado de conocimiento. Otra cosa que influye es el margen del bookie en esa apuesta determinada. A menor margen, más movimientos en las lineas y, por lo general, una búsqueda más eficiente de la asignación de cuotas.
Otras veces las lineas se mueven de forma natural. Mucha gente, sin contacto aparente, entra en la misma dirección independientemente. En estos casos, hay más probabilidades de que el valor se deba a un demérito del oddsmaker, a una cuota especialmente mal puesta. Si es debido a un rumor de fixed (tongo), esto tiene sus propias reglas, pero si es un partido normal, que ha sido mal evaluado, nos encontramos en una situación interesante. ¿Cómo de mal puede llegar a estar puesta una apuesta? Mucho. Muy mal puesta. En las entradas siguientes señalaré algún ejemplo ilustrativo de esto. Y en esos casos, al oddmaker le suele costar bastante reaccionar a tiempo. Los oddsmakers son algo así como tipsters frustrados, que se creen más cerca de Dios que del hombre, y reconocer que se han equivocado de forma flagrante les lleva mucho tiempo. Bajar una linea de @1,85 a @1,75 no es grave. Pero si en un partido de fútbol el oddsmaker tiene que mover un gol o gol y medio de handicaps, prácticamente está asegurando perder dinero en el evento. Y claro, esto es una situación un poco embarazosa. ¡A ver cómo se lo explica a su jefe! Es humano tener la tentación de no bajar del todo las lineas para tener alguna posibilidad de ser auxiliados por el azar, que sabemos que a largo plazo no influye, pero que a corto plazo sí.
A este respecto, un detalle interesante es que si un oddsmaker se equivoca gravemente en una evento, probablemente es porque no tiene ni idea de qué es a lo que está asignando cuotas o porque lo está realizando con cierta superficialidad. Nos ha dado una muestra evidente de debilidad. Por lo que no está de más chequear el resto de partidos de la jornada de esta competición, para intentar descubrir nuevos errores, una mala evaluación masiva de las cuotas.
El movimiento de cuotas también trae consigo otras ventajas añadidas. No todo es malo. No todo es apostar en peores condiciones. También vamos a conseguir una pequeña ventaja respecto a los límites, vamos a disponer de una oportunidad para volver a apostar y sobreponderar. Si la línea de handicap se mueve, en la práctica se trata de una apuesta diferente y si habíamos agotado los límites (personales o generales) disponibles para la apuesta original, vamos a poder volver a realizar una nueva apuesta en el mismo evento. Lo mismo suele pasar en muchos bookies si la linea se mantiene, pero cambian las cuotas. Son apuestas diferentes y vamos a poder ampliar nuestros límites.
5 comentarios:
Creo que para evitar el "vertigo" o el dejarnos llevar lo mejor que podemos hacer es mostrarnos confiados en nuestros conocimientos y en menor medida intuiciones, no esta de más constrartar con opiniones de buenos tipsters, para ver si siguen más o menos nuestra propia linea, pero nunca olvidando que somos nosotros los que apostamos nuestro propio dinero.
las condiciones han cambiado. ¿Qué hacemos ahora?
Si lo que ha variado son las líneas del pick, entonces lo que podemos hacer es mirar en casas que te dejan mover esas lineas como bet365 y ver la diferencia de las cuotas actuales respecto a las anteriores. Si seguimos pensando en que hay value, recalculamos el stake (menor al inicial) y si no, lo declaramos NO-BET.
Este fin de semana Ralmach propuso en Forobet un pick a favor del Under 54,5 en el partido “Algeciras-Antequera” a @1,90 (stake 6/10) y como era de esperar la mayoría de las casas tardaron poco en bajar la linea de goles a 53,2 (incluso alguna a 52,5). ¿Seguía teniendo value la apuesta? Pues la diferencia de un gol en balonmano puede suponer pasar de una cuota @1,83 a @1,53, por lo que el value se reduce drásticamente. El resultado final fue de 27-27 (54 goles).
Tambien depende del tipster, no??
Porque yo si veo un pick de Anastazija a 1.90 creo que podría sellarlo tranquilamente a 1.70.
La estimacion es de un 6% mas, pero si el tio ronda más del 10% en sus picks aun me queda un value aceptable.
En cambio si el pick lo pongo yo seguramente se vaya a la mierda :D
Entonces queda claro que debemos recalcular el stake al variar el pick, repensarnos las condiciones de lo que vamos a apostar.
Pero mi pregunta es otra: ¿Antes de pararos a analizar un partido miráis las cuotas? ¿o tratáis de hacer una valoración objetiva antes de saber lo que piensa el mercado de dicho pick?
Saludos
En este caso tener vértigo se consideraria hasta positivo, ya que solo nos interesa comprar al precio que creemos que corresponde con la calidad del producto.
En el mercado si no me ofrecen la lubina a 24 el kilo, la descarto y busco otro pescado que quizas por 22 me de como para tener el plato en la carta...
Lo que habeis dicho el resto, recalcular la apuesta y considerar si existe value en alguna direccion.
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