El mundo de las apuestas y de la inversión en Bolsa están íntimamente relacionados. En el segundo caso, los profesionales del sector están mejor vistos y debería ser porque el Mercado de Valores sirve para financiar las empresas y en general para crear riqueza, mientras que en las apuestas deportivas lo que principalmente sucede es que las divisas abandonan el país en dirección a países extranjeros, paraísos fiscales principalmente. Pero no es por eso por lo que un dealer o un broker está mejor visto que un gambitero. Es por la ropa. Uno va en traje y corbata, engominado, y eso ya le dignifica.
Sin embargo no existe un mundo más corrupto y vergonzoso que el de la Bolsa de Valores. La generación de riqueza promedio de una empresa o un banco es del orden del 10%, muy por encima del valor del dinero (Euribor), que marca los intereses de los plazos fijos que actualmente se mueve por el 3-4%. En ese margen deferencial entre un interés y otro existe una nutrida comunidad de profesionales organizados que se dedican a intentan desterrar al pequeño accionista de la zona de beneficios, para lo que utilizan cualquier artimaña legal posible y también las ilegales. Asustar, disimular, mentir descaradamente y quebrantar las normas. Todo vale. Para más indicaciones, basta con leer el libro "Recuerdos de un operador de acciones" (autobiografía de Edwin Lefevre, Aka Jesse Livermore). La única posibilidad del pequeño inversor es desarrollar un agudo sentido común o ser auxiliado por los organismos de control (CNMV, Comisión Nacional del Mercado de Valores). Sin embargo, según el showman de Putabolsa, estos organismos básicamente son muy poco eficaces, como manifiesta en este video:
Con las apuestas se corre el peligro de que se llegue a estos límites de manipulación. A mí modo de ver, los bookies y sobre todo Betfair, que es donde se mueve un mercado de más alto nivel, deben de velar por la limpieza del juego, en aras del interés general. Me refiero a:
En las entradas siguientes voy a tocar estos puntos con más profundidad con ejemplos de actualidad.
Sin embargo no existe un mundo más corrupto y vergonzoso que el de la Bolsa de Valores. La generación de riqueza promedio de una empresa o un banco es del orden del 10%, muy por encima del valor del dinero (Euribor), que marca los intereses de los plazos fijos que actualmente se mueve por el 3-4%. En ese margen deferencial entre un interés y otro existe una nutrida comunidad de profesionales organizados que se dedican a intentan desterrar al pequeño accionista de la zona de beneficios, para lo que utilizan cualquier artimaña legal posible y también las ilegales. Asustar, disimular, mentir descaradamente y quebrantar las normas. Todo vale. Para más indicaciones, basta con leer el libro "Recuerdos de un operador de acciones" (autobiografía de Edwin Lefevre, Aka Jesse Livermore). La única posibilidad del pequeño inversor es desarrollar un agudo sentido común o ser auxiliado por los organismos de control (CNMV, Comisión Nacional del Mercado de Valores). Sin embargo, según el showman de Putabolsa, estos organismos básicamente son muy poco eficaces, como manifiesta en este video:
Con las apuestas se corre el peligro de que se llegue a estos límites de manipulación. A mí modo de ver, los bookies y sobre todo Betfair, que es donde se mueve un mercado de más alto nivel, deben de velar por la limpieza del juego, en aras del interés general. Me refiero a:
- Verificar que no exista manipulación directa de resultados por las partes interesadas y colaborar plenamente con los organismos deportivos para las posibles acciones que de deban tomar para detectar y sancionar a los tramposos.
- Controlar que todo el mercado tiene acceso a la información disponible, es decir, que no existan lobbys con información privilegiada.
En las entradas siguientes voy a tocar estos puntos con más profundidad con ejemplos de actualidad.
3 comentarios:
Bueno, lo importante de todos los juegos es conocer bien las reglas para saber a que hay que atenerse y la bolsa no es una excepción. Evidentemente la bolsa y los elementos reguladores tienen demasiadas brechas, pero cuando una empresa emite (interesadamente)una nota informativa cuando la bolsa está a punto de cerrar, la CNMV no puede hacer nada. No es cuestión de meterse con el árbitro; es cuestión de saber que no un equipo de tercera no puede salir al bernabeu al ataque porque sale culeado; tendrá que adaptarse a las circunstancias, salir a la defensiva en el bernaveu, y aprovechar el partido en su propio campo para sentenciar la eliminatoria. Invertir en bolsa jugando minuto a minuto puede salir bien para un minoritario sólo si se equivoca; es decir, si actúa tan mal que hace todo lo contrario de los que harían los grandes analistas de tener la misma información que el. Lo inteligente es jugar en otros tiempos; apostar más en cada inversión dinero y jugar a un más largo plazo; porque de ese modo, la información pública (la que tienen los minoritarios) sí resulta muy útil y conseguimos rentabilidades mayores (mucho mayores) que la del índice de referencia. En fin, me parece un video interesante, pero lo de ser revolucionario luchador en bolsa no cuadra mucho.
JUAN SIN TIERRA
Voy a cantar el corrido de un hombre que fue a la guerra
Y anduvo en la sierra herido para conquistar su tierra
Lo conocí en la batalla y entre tanta bala cera
Que el que es revolucionario puede morir donde quiera
El general nos decía: peleen con mucho valor
Les vamos a dar parcela cuando haya repartición
No olvidamos el valor de Víctor Jara
Dando la cara siempre a la represión
Le cortaron sus dedos y su lengua
Y hasta la muerte gritó revolución
Gritó Emiliano Zapata: Quiero tierra y libertad
Y el gobierno se reía cuando le iban a enterrar
Mi padre fue peón de hacienda y yo un revolucionario
Mis hijos pusieron tiendas y mi nieto es funcionario
Vuela ,vuela, palomita, pósate en aquella higuera
Que aquí se acaba el corrido del mentado Juan Sin Tierra
No olvidamos el valor de Víctor Jara
Dando la cara siempre a la represión
Le cortaron sus dedos y su lengua
Y hasta la muerte gritó revolución
Revolución, revolución, Víctor Jara cantó
No estoy de acuerdo en que Betfair o los bookies sean los que tengan que controlar el mercado. Ellos pueden reportar a los organismos competentes posibles prácticas sospechosas, dando los nombres de los implicados, pero no son "reguladores" por lo que no es su función regular el mercado. Betfair es un simple mercado, tu apuestas contra otro jugador. Si él tiene más información que tú, no es culpa de Betfair.
Te he puesto un mail sobre casos parecidos en las apuestas.
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